El té es una infusión que se crea a partir de las hojas y brotes del árbol Camellia Sinensis. Son diferentes tés los que proceden de dicho arbol (verde, negro, etc.) La diferencia entre ellos se encuentra en su método de procesamiento.
El té es una bebida que desde hace tiempo se consume mucho. De hecho junto al café es de las más consumidas y se espera, según varios estudios, que siga creciendo.
Beneficios
Ofrece beneficios para la salud, pero hay que saber hasta qué punto. Los excesos no son buenos. Según expertos se recomienda beber entre 7 y 10 tazas de té a la semana. No más de dos tazas al día. Solo así es posible conocer sus beneficios.
El té, sobre todo el verde es rico en vitaminas, minerales, es fuente de antioxidantes y tiene propiedades antiinflamatorias, entre muchos otros.
Por ello, se puede afirmar que:
- Combate el envejecimiento
- Ayuda a reducir la grasa.
- Mejor el metabolismo.
- Fortalece el sistema inmunológico.
- Tiene efecto relajante.
- Reduce el estrés y la ansiedad.
- Disminuye el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
- Mejora la calidad de vida.
- Ayuda a prevenir infecciones.
¿El té mancha los dientes?
Uno de los mayores inconvenientes de esta infusión es que mancha los dientes. Esto se debe a que tiene taninos (una sustancia, especie de colorante). Es un elementos que se encuentra sobre todo en el té negro, por lo que es el que más repercute en el esmalte de los dientes. Con el paso del tiempo se vuelven amarillentos y opacos. Por ello, no hay que consumirlo en abundancia y se recomienda acudir al dentista con frecuencia para hacer un seguimiento.
A pesar de este inconveniente, el té (verde) también es beneficioso para la salud bucal. Al ser antioxidante elimina las bacterias, previene la formación de sarro y de caries. Por su efecto antibacteriano ayuda a reducir la halitosis (mal aliento). Además, mejora la sensibilidad dental y protege frente a algunas enfermedades periodontales.
Por todo lo mencionado, el té y concretamente el té verde ofrece numerosos beneficios para la salud. Siempre y cuando se consuma con control y se sigan las recomendaciones de los especialistas.
